26 de septiembre de 2024
La Agrupación Flor de Murga, hizo uso este jueves de la herramienta legislativa de la Banca 21 para proponer el cambio de denominación de esa arteria, en homenaje al cura párroco fallecido hace pocos meses.
María del Carmen Silva fue la encargada de presentar el
proyecto en la Banca 21, cuyo expediente quedó en la comisión respectiva y tomó
estado legislativo.
Silva agradeció primeramente "al concejal Nicolás Carrillo
que nos asesoró y nos siguió el trámite de pedido de Banca 21, y al doctor Lucas
Bilbao, que nos dio una gran mano para la elaboración del proyecto de esta
ordenanza y su fundamentación".
Seguidamente, expuso que "desde nuestra organización, Flor
de Murga, decidimos realizarle un homenaje a quien fuese un referente religioso
social y político de nuestra ciudad, el padre Raúl Troncoso. El espectáculo se llamó
Corazón de Terciopelo y de Metal y ahí mismo, lanzamos una campaña de
recolección de firmas que se extendió durante estos meses bajo el lema 'Que Tandil
nunca olvide al padre Raúl'. La recolección de firmas tenía un petitorio
concreto: solicitar que se coloque el nombre 'padre Raúl Troncoso' a una calle,
plaza u otro espacio público visible de la ciudad de Tandil".
"En estos meses transcurridos desde el carnaval a la fecha,
presentamos el espectáculo en numerosos eventos y tuvimos ocasión de
intercambiar ideas con vecinos y vecinas que acompañaban nuestra iniciativa, y de
aquellas charlas fue surgiendo un consenso, una propuesta acerca del mejor
lugar para inmortalizar el nombre del Padre Raúl y su legado. Se trata de una
Avenida de tan solo tres cuadras, de acceso al máximo símbolo religioso de nuestra
ciudad, el Calvario, punto de encuentro de miles de fieles durante el año,
fundamentalmente en los días de Semana Santa. Es un lugar visible, altamente
transitado y con gran significancia religiosa, dimensión esta que la une
indefectiblemente con la trayectoria del padre Raúl", añadió Silva.
En ese sentido, pidieron al HCD, "considerar el cambio de
nombre de la avenida Monseñor de Andrea por el de Avenida Padre Raúl Troncoso.
Nombrar es otorgar una identidad, en el caso de una calle, aquellas que llevan
nombres de personas, constituyen un modo de sostener viva esa memoria".
"Sobre finales del siglo XIX y principios del XX, las calles
comenzaron a llevar nombres de aquellos hombres que habitaban el panteón
nacional. Sin embargo, a lo largo del siglo XX y, sobre todo, en las últimas
décadas, afloraron también nombres de vecinos y vecinas, o de gente vinculada a
nuestra ciudad, reconocidos por algún mérito. Tandil es un buen ejemplo de
discusión y renombramiento de calles, un ejercicio que ha sido sostenido en
este cuerpo deliberativo. Por ejemplo, la actual calle Eduardo Arana, Intendente
de principios del siglo XX, antes de cambiarse de nombre, en la década de 1950
llevaba el nombre de Provincias Unidas. Desde la llegada del ferrocarril en 1883,
la actual Avenida Colón llevó el nombre de Avenida Nordeste, imponiéndose su
actual en 1893 y cambiando su nombre por Figueroa en la década de 1940 hasta
volver a su nombre actual. Luego del golpe militar de 1955, la actual calle Fuerte
Independencia, previamente llevó el nombre de calle Centenario, y con
posterioridad a la visita del entonces presidente del Brasil, Getulio Vargas,
la actual Avenida Buzón se llamó Avenida Vargas, hasta imponerse su nombre
actual, una vez inaugurada la terminal de Ómnibus en 1973".
"Restablecida la Democracia, durante la década de 1980, los
partidos mayoritarios de ese momento, peronismo y radicalismo, también
acordaron imponer nuevos nombres a dos tramos de las avenidas Rivadavia y Buzón,
por los de Teniente General Perón y Ricardo Balbín, respectivamente. También la
actual Avenida Monseñor Luis Actis, antes se llamó Avenida Antártida Argentina",
amplió.
Silva sostuvo que "este somero repaso da cuenta de la
voluntad política que distintos bloques y cuerpos legislativos de Tandil, han
tenido, para cambiar nombres de calles. Distintas generaciones, en distintos
contextos históricos, con diversos intereses y deseos, con mayor o menor debate
de la ciudadanía, han propiciado y sostenido cambios en los nombres de las
calles. A partir de lo expuesto, queda en evidencia que los nombres de las
calles no son inmutables. Por otra parte, y sin ánimo de polemizar acerca de la
figura de Monseñor de Andrea, consideramos que el nombre del Padre Raúl es
mucho más representativo para los tandilenses. Raúl ha dedicado más de un
tercio de su vida a trabajar y desarrollar sus actividades en Tandil y, si bien
ambos han sido referentes religiosos sociales y políticos, la trayectoria de
Raúl está anclada en nuestra ciudad por haber impulsado un innumerable conjunto
de obras materiales e inmateriales, por el bienestar de nuestros vecinos y
vecinas".
Luego recordaron que "Miguel de Andrea fue un Obispo
argentino formado en Roma, con actividad social en las primeras décadas del
siglo XX, cuando el catolicismo y la Iglesia usaron un número importante de acciones
para atender a la entonces llamada 'cuestión social', con el objeto de frenar,
como se decía en ese momento, a la expansión del comunismo. Obispo muy popular
para los cánones de su época, de Andrea fue un hombre asociado a la
aristocracia porteña, que acompañó muchos de los pasos de la Liga Patriótica,
aquella organización parapolicial, de carácter nacionalista, anticomunista y
antisemita, que operó entre las décadas de 1910 y 1920. La historiadora Miranda
Lida, en el libro que retrata su trayectoria, llamó a de Andrea 'un
antiperonista asordinado' y lo ubica presenciando y acompañando los actos y a
la dictadura militar que derrocó al presidente Juan Domingo Perón en 1955".
"Señalamos esto con el objeto de remarcar justamente, la
diferencia con aquellos valores profundamente pacifistas y democráticos que el
padre Raúl nos inculcó, durante las más de tres décadas y media que vivió entre
nosotros. Su nombre está inevitablemente asociado a numerosas obras que
beneficiaron a los tandilenses, fundamentalmente a los más necesitados. Sobran
los ejemplos: el complejo habitacional para personas mayores, Casas de la Esperanza,
el espacio para las infancias Pajaritos de la Calle, las iniciativas que se
nuclean en torno al Foro Social Tandil 21, con las crisis del 2001, el impulso para
la creación del Banco de Alimentos Tandil, los programas de microcréditos que
articuló con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, en torno al Banco
Popular de la Buena Fe, iniciativa que se tornó política pública nacional, la Radio
de la Sierra o la Pastoral Universitaria, entre muchas otras; pero también fue
una figura clave que acompañó diversos espacios y proyectos, que consideró
legítimos, para mejorar la vida de los tandilenses, tales como la Asamblea por
la Preservación de las Sierras, o su cercanía al grupo Memoria por la Vida en Democracia.
Y, como carnavaleros, nunca olvidaremos su apoyo decidido a la Fundación del Carnaval
de Mi Tandil". "Siempre estuvo cerca de la Universidad Nacional del Centro,
articulando proyectos, escuchando propuestas y generando trabajo conjunto. Colaboró
con el funcionamiento del comedor universitario durante la hiperinflación de
1989, y generó espacios de pensión para estudiantes".
"Luego de la crisis del 2001, Tandil lo recordará también
como una figura clave en la mediación de conflictos locales, como alguien que
siempre buscó aportar soluciones a momento críticos, brindando escucha,
comprensión y acompañamiento; y finalmente, algo por lo que se destacó
enérgicamente el padre Raúl, recibió, escuchó, trabajó, articuló y creó, junto
a personas, grupos e instituciones, sin distinciones de credo ni adscripciones
políticas, por eso fue un hombre que dejó una de las huellas más profundas en
el Tandil de la Democracia".
Finalmente, indicaron que la propuesta "está refrendada por
cientos de vecinos y vecinas, y por las numerosas instituciones que creó el Padre
Raúl. Les pedimos que acompañen este proyecto y queremos cerrar con una hermosa
definición que sobre el padre Raúl hiciera el sacerdote italiano Gianfranco Testa,
prisionero del terrorismo de Estado, igual que Raúl y tantos religiosos
comprometidos con su pueblo. En sus memorias, relata Testa: 'en la misma celda
estaba yo, con el padre Raúl, un argentino manso y decidido, de los que tienen
el guante de terciopelo y la fuerza del metal'. Es la memoria de este sacerdote
manso y decidido que fue el padre Raúl, la que pretendemos que continúe viva
con el nombre de la avenida. Es inmortalizar su vida y su legado, es la
manifestación del amor y el agradecimiento del pueblo de Tandil".
COMPARTE TU OPINION | DEJANOS UN COMENTARIO
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.