2 de octubre de 2024
Con una gran perspectiva de futuro, hace 10 años nació la Red de Innovación Local (RIL). La organización trabaja de manera colaborativa con equipos de gobierno de ciudades y municipios y un ecosistema de profesionales multidisciplinarios para generar iniciativas con el objetivo de que los habitantes mejoren su calidad de vida y accedan a nuevas oportunidades para desarrollarse.
En la última década, bajo el liderazgo de su fundadora y
actual Directora ejecutiva, RIL acompañó a más de 500 gobiernos en la transformación
integral de sus ciudades. Irazusta, quien forma parte de la red mundial de
emprendedores Ashoka y del Young Global Leaders (en el marco del Foro Económico
Mundial), dialogó con GREENBOX.
GB: ¿Cuáles son las
principales dificultades para que existan más ciudades de oportunidades?
Un fenómeno muy propio de Argentina e incluso Latinoamérica
es que hay muchas ciudades chiquitas, con buena calidad de vida, pero pocas
oportunidades; y otras grandes que tienen mala calidad de vida debido al
tránsito, la seguridad o la falta de espacios verdes pero que concentran
muchísimas más oportunidades. Desde RIL tenemos como objetivo alcanzar el
equilibrio en unas y otras.
GB: ¿De qué forma
trabajan con los gobiernos locales para lograrlo?
Acompañamos a los gobiernos locales para planificar
estrategias sostenibles. No puede haber un proceso de innovación si hay
organizaciones quebradas en territorio o que no son sanas desde la
institucionalidad. Por eso en RIL nos enfocamos en el cambio sistémico con lo
público.
Y se hace en tres niveles. Por un lado, conectar a colegas
para que aprendan entre sí y generen comunidad: lo primero que se hace en un
área temática es convocar a una mesa de especialistas para construir el índice
de autodiagnóstico que después van a usar en el programa. El segundo momento es
acompañar a los municipios a mejorar a través de una aceleradora. Y, por
último, inspiramos y contamos lo que funciona. Entonces, RIL conecta, acelera e
inspira. Este año probablemente haya más de 150 ciudades participantes, entre
argentinas, latinoamericanas e incluso del sur global, porque ingresaron
algunas de África.
GB: ¿Cuáles son las
problemáticas promedio en agenda?
La agenda pendiente de las ciudades de menos de 100 mil
habitantes es cómo generar oportunidades para que los jóvenes no se vayan. En
el caso de las de más de 100 mil habitantes, el desafío es gestionar la
convivencia de tantas personas en materia de seguridad y servicios, por
ejemplo.
GB: ¿A qué se apunta
con Ciudades de la Energía, uno de los programas clave de 2024?
El foco es analizar cómo trabaja la eficiencia energética un
municipio, por ejemplo, para elaborar propuestas que establezcan las
condiciones que le permitan ser parte de la transición. Uno de los objetivos
apunta a preparar a las ciudades para que acompañen la lucha contra el cambio
climático, que vayan a la "carbono neutralidad" y sean interesantes para atraer
inversiones en ese sentido. Eso se logra con políticas públicas que acompañen
el esfuerzo del sector privado hacia la transición energética, porque eso le da
coherencia a tu posicionamiento como territorio de oportunidad. Desde RIL
ayudamos al municipio a tomar conciencia, evaluar y poner en agenda. Existen
varios casos de ciudades faro que incluso ya empiezan a mostrar los beneficios,
como Godoy Cruz, en Mendoza.
Trabajamos más de 13 temáticas, que van desde desarrollo
económico y urbano hasta finanzas, educación, salud, ambiente y transformación
digital. Este año, el programa Ciudades circulares es uno de los que más
postulaciones recibió, seguido por Ciudades emprendedoras, Ciudades del
conocimiento y Ciudades por la educación.
(Genneia)
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