"Macri tiene que cumplir con la ley"

BUENOS AIRES.- El ministro de Interior y Transportes, Florencio Randazzo, reiteró ayer que el gobierno de la ciudad de Buenos Aires debe "hacerse cargo del servicio de subte" porque así lo establece la ley.

En diálogo con la prensa, Randazzo fue consultado por el conflicto de los trabajadores del subte que paralizó el servicio el fin de semana y podría extenderse en los próximos días, se limitó a repetir la postura oficial.

"Nosotros queremos evitar la polémica", manifestó, pero "lo que tiene que hacer el gobierno de la ciudad de Buenos Aires es hacerse cargo del servicio de subte", sostuvo.

Eso "es lo que corresponde por decretos, por leyes y por si faltara poco por un acta-acuerdo firmada por el jefe del gobierno de la ciudad de Buenos Aires el 3 de enero, que puso en principio de ejecución con el aumento de la tarifa", manifestó el funcionario nacional.

Por otra parte, Randazzo recordó que el gremio minoritario de los empleados de ese transporte público, UTA, "ha manifestado el levantamiento del paro por los próximos tres días", aunque no mencionó que estaba pendiente de resolución la continuidad del plan de lucha del otro sindicato, la AGTSyP, que podría paralizar el servicio también mañana.

El jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, "tiene que cumplir con la ley y ayudar a mejorar el subte que es un medio de transporte muy importante en la ciudad de Buenos Aires", concluyó Randazzo.

Compensaciones

Por otro lado, Randazzo instó a quienes utilizan el transporte público en el ámbito metropolitano a sacar su tarjeta SUBE a fin de no pagar una tarifa superior y, a la vez, permitirle al Estado contar con "información" para regular la "asignación de compensaciones" a las empresas del sector.

"Es importante que quien no la sacó, la saque", reclamó el ministro, al recordar que la persona que posea la tarjeta "va a pagar lo mismo que paga hoy", mientras los pasajeros que abonen en efectivo tendrán que desembolsar una tarifa más cara, dijo.

En ese sentido, el funcionario ratificó que desde hoy "un boleto de micro que hoy sale 1,10 pesos" sin la SUBE se "va a pagar dos pesos, y en el tren un boleto promedio que vale 0,85" pesos sin el plástico costará también dos pesos.

Por eso, destacó en diálogo con la prensa, poseer una SUBE "es importante para el pasajero pero también para el Estado, que va a poder disponer de esta información muy valiosa que tiene que ver con la asignación de las compensaciones" que aporta el Gobierno al transporte público.

Los subsidios que entrega el Estado nacional a las empresas permiten que "los usuarios paguen hoy aproximadamente un 20 o 25 por ciento del pasaje pleno de estos medios de transporte", aseguró Randazzo.