22/11/2016

Espectáculos y sociales

Lorena Muñoz, directora de Gilda dijo que la cantante fue “una promotora del amor”

Lorena Muñoz, directora de la película Gilda al comienzo del diálogo con AM1560, indicó que con su productora hizo muchos productos para Paka Paka y la TV pública como Infancia Clandestina “Venimos trabajando sin descanso”.
Admitió que hubo muchos intentos de llevar a la pantalla grande la vida de Gilda, aunque por oposición de sus familiares, recién pudo plasmarlo Lorena Muñoz
“Para hacer la película se necesitan no solo los derechos musicales, sino que esos derechos autorales, también se necesitan los derechos de su vida. La historia de Miriam Alejandra Bianchi, que para el hijo no es Gilda, es su mamá, es todo un tema y también hay derechos sobre la imagen. Es bastante complejo el tema y por suerte el terminó cediendo esos derechos, después de muchísimos años, creo que fueron 15”, expresó la cineasta.
“Incluso cuando la fui a ver a Natalia Oreiro, creo que le habían alcanzado cuatro o cinco guiones, pero no habían logrado conseguir esos derechos, es un milagro digna de ella”, indicó Muñoz.
Al referirse a como llega la posibilidad de realizar el film, expresó “soy una gran amante de la música popular, soy una fanática del tango, sobre todo el tango de los 30 y los 40 como el tango canción y las primeras orquestas, también me gusta mucho el folklore y la verdad que la cumbia particularmente no era un género que me apasionara, pero si me gustaba y tenía un desconocimiento total. Me regalaron hace muchos años un CD de Gilda, lo escuché bastante. Uno está acostumbrado a asociarla a los casamientos, a los cumpleaños de 15 y es una música muy alegre, porque la cumbia es muy alegre. Y en algún momento me encontré cantando ‘No me arrepiento de este amor’ y dije que la letra no es tan alegre. Me pareció llamativo, entonces investigué un poco y me di cuenta que ella era autora de la letra”.
“Cuando ella empieza en el 90. Lo conoce a Toti, el casting es el 20 de septiembre de 1990 y parte el 7 de septiembre de 1996, por lo que todos sus discos y su carrera lo hace en un tiempo meteórico. Me pareció muy interesante el contrapunto emocional que se daba. Esto de la melodía medio mantrica de la cumbia y por el otro una letra por debajo que llega hasta los huesos, que es fuerte, muy emocional y que aparte es una letra con cierta elegancia poética, es maravillosa realmente y es muy difícil escribir como ella” detalló la directora del film.
Cuando se la consultó sobre quien era Gilda, expresó “para mi Gilda es Miriam Alejandra Bianchi, para mí es como la madre, la maestra jardinera, la amiga, que se convirtió en Gilda en un momento. Eso es lo que intentamos narrar con la película. Mucha gente cree antes de ir a ver la película que es la historia de Gilda, pero es la historia de cómo Miriam se convierte en Gilda. Es la historia de la construcción del mito, no la historia del mito en sí, los mitos, la santa aparece en el momento de su desaparición y donde aparecen las versiones, las distintas versiones, las contraposiciones y en realidad para nosotros nos parecía mucho más interesante que esa construcción estuviera dada a partir de una mujer totalmente común, con conflictos universales como pueden ser esto es mucho más cómodo quedarme siendo Miriam que convertirme en Gilda, mucho más cómodo”.
“Ella, su familia está en contra de esta posibilidad; la misma gente de la cumbia, como es tan distinta la rechaza”, expresó que los comienzos fueron difíciles en su carrera, porque las mujeres eran muy pocas “y las que lo lograban, estar al frente de un grupo de hombres, eran desde un lugar muy distinto, donde lo importante, el valor estaba dado por la figura, el físico, ser exuberantes, no. Por lo general son como rubias medio despampanantes, bellísimas, pero con otro estilo y ella flaquita, siempre decía que había llegado a triunfar gracias a su voz y a la ayuda de la gente, pero era muy chiquita, muy flaquita, se maquillaba poco, otro estilo. Incluso si uno ve el atuendo de ella era el típico como rockero, la pollera de cuero, con la chaqueta de cuero, con cierres. Hay algo ahí, como que viene de otro lado, incluso el vestuario. Es muy disímil a lo que se veía en el momento y eso me parece que también produjo cierta satisfacción” reflexionó sobre la cantante que se convirtió en mito.
“A mí también me pasó eso. Me llamó tanto la atención esa personita tan distinta a todo lo otro que había en el momento, que se enfrentó. Una fuerza enorme de voluntad, de fe, con un mensaje muy esperanzador. Es una promotora del amor” explicó Muñoz.
Al ser consultada sobre cómo fue hacer la película, dijo “lo primero que hice fue hablar con Natalia y proponérselo. Se superentusiasmó, me dijo yo soy Gilda, no se te ocurra llamar a otra actriz. La conocía de Infancia clandestina y quedamos medio amigas, con una linda relación, habíamos quedado en hacer algo juntas, sin saber qué”.
“Cuando se me ocurrió esta idea, lo primero que hice fue llamarla, porque es difícil encontrar una actriz que tenga ese cariz natural y esa aceptación por parte de la gente y que tenga esa autenticidad como tenía Gilda, que es casi un sello de autor y también que se mantiene fiel a sus principios y que no negocia un montón de cosas, y que no tranza. Se le han inventado un montón de situaciones y siempre sale airosa. Tiene un manejo muy bueno de su carrera y aparte es cantante. Había escuchado los recitales en Rusia, como la adora la gente es impresionante” aseguró Lorena Muñoz.
“Naty es una gran actriz y una gran compañera, la quiero mucho, fue una experiencia muy linda trabajar con ella, muy gratificante, con todo el equipo. No hubo nada que desentonara, una armonía natural y como mis socios son los coproductores me dieron libertad a mí hacer lo que yo quería. Fue algo muy gratificante, en general no es así, el director no define todo, sino que hay muchos condimentos, ajustes, lo presupuestario, donde hay que negociar lo que uno quiere con lo que se puede”, graficó sobre la actriz y amiga personal
“Lo primero que hice fue contarle a Naty, me dijo que si y después conseguir los derechos y a partir de ese momento recién ahí sentí que había una gran parte de la película adentro, que se podía empezar a buscar coproductores y ahí le presentamos el proyecto a Axell Cuchi Vazquez y desde el primer momento dijo cuenten conmigo. Fue muy bueno su aporte siempre. Remarco que no es el contacto con Telefe, con Telefónica, sino que es una persona que se involucra integralmente en el proyecto. Hemos tenido reuniones de muchas horas de puesta en escena, casting, no desde un lugar de imposición, sino de aporte, es un gran aliado, un gran amigo”, destacó más adelante.
Agregó que “cuando uno logra excelencia, trabajar con gente talentosa y que encima uno respeta y quiere, que hay un cariño, es muy hermoso, porque es un combo perfecto”.
Sobre el éxito, dijo que “cuando las cosas fluyen, una cosa lleva a la otra, es como que se alinean los planetas. El grupo no se fija en las luces bajas como me gusta decir. Fue todo muy amoroso, armonioso, sincronía, fue natural, orgánico”.
Finalmente dijo que tiene deseos de venir a Tandil, para responder a las invitaciones que le han realizado desde el Espacio INCAA-UNICEN.

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