Al menos cuatro policías jordanos murieron hoy en un tiroteo con un grupo
de hombres armados que se atrincheró en un edificio de la localidad
histórica de Al Karak, en el sur del país, informó la prensa local.
La agencia de noticias estatal Petra informó de la muerte de los agentes y
detalló que los hombres armados no tienen relación con el grupo que se
atrincheró el pasado domingo en la ciudadela histórica de Al Karak, en un
asalto que se saldó con 14 muertos, entre ellos siete uniformados.
El ataque del domingo pasado fue reivindicado hoy por el grupo islamista
radical Estado Islámico (EI) en un comunicado difundido a través del
sistema de mensajería instántanea Telegram, y cuya veracidad no ha podido
ser confirmada.
En el mensaje, el EI aseguró que cuatro de sus miembros, armados con
ametralladoras y granadas, perpetraron el ataque en el que falleció una
turista canadiense, siete policías, dos civiles jordanos y los cuatro
atacantes.
En el comunicado, el EI detalló que en primer lugar sus hombres atacaron
una patrulla de policía y después una comisaría, donde mataron a varios
"apóstatas" y más tarde se atrincheraron en el histórico castillo de Al
Karak, construido por los cruzados en la Edad Media y ubicado 120
kilómetros al sur de la capital, Amán.
Allí estuvieron por seis horas y, según el comunicado, aseguran que había
varios nacionales "de países de la alianza de las cruzadas", informó la
agencia de noticias EFE.
Jordania es miembro de la coalición internacional liderada por Estados
Unidos que se enfrenta al Estado Islámico en las vecinas Siria e Irak.
El junio pasado, Jordania fue blanco de un atentado con coche bomba cerca
de la frontera con Siria en el que fueron asesinados seis soldados.
Quince días después, tuvo lugar un atentado suicida perpetrado por los
yihadistas, que conducían un auto lleno de explosivos, cerca del campo de
refugiados sirios de Rukban, en la frontera noreste con Siria, en el que
murieron siete soldados jordanos.