El equipo tandilense que milita en la B Nacional, Ramón Santamarina, volvió a los entrenamientos en la mañana de este lunes. El plantel dirigido por Héctor Arzubialde tuvo el primer encuentro en el estadio San Martín, lugar elegido para juntarse y comenzar a trabajar pero también escenario para ir planificando lo que será la pretemporada.
Sin la presencia de dirigentes, al mismo tiempo que comenzaba el entrenamiento Pablo Bossio hacía declaraciones en Radio Voz (FM 106.9), la jornada empezó con una reunión interna en uno de los vestuarios del escenario mayor del fútbol tandilense.
La charla, a puertas cerradas, fue solamente entre los futbolistas. La misma empezó a las 8.45 con la llegada de Alfredo González Bordón y finalizó a las 9.10. Minutos más tarde el que ingresaría al vestuario sería Arzubialde, junto a sus colaboradores, para mantener una larga reunión que se extendió por espacio de casi una hora.
Mientras tanto la cancha ya estaba con todos los elementos necesarios para poder comenzar a realizar algunos trabajos con pelota. Cerca de las 10.30 los jugadores ingresaron al campo de juego para tener el primer entrenamiento de la temporada.
El entrenador los reunió a todos en la mitad del campo y, luego de unos breves conceptos, los jugadores comenzaron a moverse. El clima que se palpaba era de preocupación y no es para menos, debido a que están con casi tres meses de sueldos atrasados.
Los integrantes del plantel se fueron de vacaciones y a pasar las fiestas sin dinero, como consecuencia de los casi tres meses de atrasos que tiene la dirigencia. Para colmo, en la jornada de ayer no apareció Pablo Bossio como para brindar explicaciones y aclarar un poco el panorama de cara al futuro.
Seguramente se vendrán días de muchas charlas y negociaciones para tratar de poder achicar la deuda que mantienen con los futbolistas. Santamarina viene teniendo un claro problema, durante todo el año pasado, que pasa por la falta de generación de recursos y sponsors.
Atrás quedaron las épocas doradas en donde todos estaban al día y poco se necesitaba de los ingresos que llegaban de AFA y televisión. La realidad se modificó y hoy esos aportes de la entidad del fútbol argentino y TyC Sports resultan fundamentales para las finanzas aurinegras.
Con mucha incertidumbre, sin tener claro cuándo podrán cobrar parte de la deuda, los deportistas del club serrano empezaron una nueva etapa que apuntará a la preparación para el regreso a la competencia en la B Nacional.